Hacía tiempo que no sentía una nostalgia tan rica de mi país. Ésa que te hace reír hasta no poder más por los movimientos de cadera de alguna espontánea que se sube al escenario aupada por la zalamería del cantante o ésa que te hace sentir tan orgullosa de tu país y sus productos, al ver que hay una cola enorme de gente esperando para comerse una arepita con café con leche o un cocktail hecho con el mejor ron del mundo.

Hoy, por un instante, me pude trasladar a mi época feliz en Venezuela: la de los tambores en las fiestas, en la que todos bailábamos independientemente de nuestra condición; en la que las mayores desavenencias se producían por el béisbol y en la que gracias a Dios la cerveza hacía lo propio para calmar los ánimos y crear después de unas cuantas, vínculos fraternales eternos.

Ese momento tuvo lugar en el stand de Venezuela en FITUR. Con un diseño fresco y moderno, Venezuela brindó lo mejor que tiene a sus visitantes: música, baile, ron, café y gastronomía. Los representantes de la música y de la cocina también los mejores: Carlos Télez y Martín Díaz Ferrer interpretando, y Nelson Méndez, mejor conocido como el chamán de la comida amazónica y Jaime Llanos, miembro de la fundación Cocina propia, como embajadores de nuestra cocina.


Hoy venezolanos, españoles y todo el que se quedó a disfrutar de nuestra música bailaron al ritmo de Moliendo Café, El Gavilán y hasta la Conga. Todos fundidos en un mismo son, disfrutando como niños como lo hacíamos otrora. Haciendo el trencito, levantando la mano, moviendo la cintura….

Por todas esas sensaciones re-vividas en la tarde de hoy, los invito a pasar mañana por el stand venezolano en FITUR ubicado en el pabellón 3. A las 11 am y a las 4 pm tendrán eventos musicales de nuevo en las que se interpretarán joropos, merengues y tambores. La invitación es simplemente a reencontrarse, aunque sea por un instante, con la Venezuela en la que crecimos y con la Venezuela que queremos. A pasar un rato rico bailando al son de los tambores de Ocumare mientras disfrutas de un exquisito quesillo de yuca con cacao del Amazonas o unos tequeños con una deliciosa salsa de ron, café y papelón.

Y así se baila tambor en Madrid…
Y claro, la conga….